TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis.- Por los delitos de tortura, privación ilegal de la libertad, abuso de autoridad y asociación delictuosa, fue detenido el alcalde perredista de Pueblo Nuevo Solistahuacán, en Chiapas, Enoc Díaz Pérez, junto con sus escoltas.
En conferencia de prensa, el procurador general de Justicia de Chiapas, Raciel López Salazar, informó que la detención del alcalde se registró luego de las denuncias presentadas en su contra y de las investigaciones realizadas por la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Relacionados con Servidores Públicos.
Debido a los delitos por los que se ejercita la acción penal, el edil desaforado por diputados del Congreso de Chiapas podría alcanzar hasta 30 años de prisión.
Lo anterior, luego de la denuncia presentada por tres ciudadanos, quienes señalaron haber sido privados de su libertad y golpeados el pasado 23 de diciembre por un grupo de sujetos encabezado por el entonces alcalde.
Ante estos hechos, la Fiscalía Especializada integró la averiguación previa 4/NO69/2015 y llevó a cabo el desahogo de las diligencias correspondientes.
Cabe destacar que, de acuerdo con la indagatoria, el día de los hechos Enoc Díaz arribó al restaurante Siempre verde, ubicado en el municipio Jitotol.
Dijo que, en el lugar, su propietario, Édgar Belisario Fonseca García, acompañado de Héctor Constantino Rendís Trujillo y Alejandro García Gil, fue detenido de forma ilegal por un grupo de unos 30 sujetos que portaban armas de fuego, vestían de civil y viajaban a bordo de camionetas particulares.
Testigos señalaron que, algunos de ellos, portaban un chaleco en color negro con la leyenda “Grupo proyecto amigo revolucionario número 7”.
Las pesquisas indican que en ese momento, el alcalde se dirigió al empresario Édgar Belisario, a quien le reclamó por la supuesta autoría intelectual en la publicación de un texto en su contra.
Posteriormente, instruyó al grupo de sujetos a detener a las tres víctimas, a quienes trasladaron a bordo de las camionetas.
En un primer momento, fueron llevados a la cárcel municipal de Pueblo Nuevo Solistahuacán y después al Auditorio Municipal, donde permanecieron privados de su libertad, siendo torturados y obligados a firmar un documento en el que se comprometían a no seguir divulgando dicha nota.
Por su parte, el secretario de Gobierno, Eduardo Ramírez Aguilar, dijo que en torno a los hechos, el gobierno del estado actuó a partir de pruebas contundentes y de denuncias contra el alcalde.
Por esta razón, este gobierno, a través de la Procuraduría General de Justicia del Estado, procedió de manera inmediata en su detención, así como en la solicitud al Congreso del estado para el desafuero inmediato de dicho funcionario”, finalizó.