Ada Iveth Morales
La Trinitaria, Chiapas.- La puesta en marcha del Centro de Atención
Integral al Transito Fronterizo (CAITF) ubicada sobre la carretera de La
Trinitaria-Comitán, está representando un negocio redondo para los habitantes
de la comunidad “Michoacán”.
Esta comunidad que colinda con el “Punto de Inspección Integral”, deja
un ingreso a los habitantes y se da por acuerdo internos para colocar una pluma
para controlar el paso de todos los que buscan burlar las medidas de seguridad
de este recinto.
El paso vehicular por la parte de atrás del Centro de Atención Integral
al Transito Fronterizo (CAITF) es de cien pesos para particulares y para
quienes lleven mercancía en transporte público o en camionetas de 200 pesos.
Con este cobro los automovilistas burlan las inspecciones del Ejercito
Mexicano, Secretaria de Gobernación, Salud, SAGARPA, Servicio de Administración
Tributaria (SAT), Policía Federal (PF), Instituto Nacional de Migración (INM).
Ante estos cobros por el paso de la brecha que desvía a la carretera de
Copalar las operaciones del Centro de Atención Integral al Transito Fronterizo
(CAITF) se vuelven obsoletas al tener pocos resultados en la estrategia
integral de atención a la frontera sur.